Celebramos el reconocimiento que la Asamblea Departamental en el Valle del Cauca, en cabeza de nuestras diputadas Paola Arenas y Catherine Morales, le hicieron a nuestra lideresa e integrante de la Comisión de Igualdad de Género y Empoderamiento de la Mujer de nuestro Partido Sofi Ospina.
El acto de exaltación y condecoración con la orden al mérito vallecaucano en el grado Cruz de Caballero, le fue dada a Sofi Ospina por su trabajo pro bono en pro de los derechos de las mujeres para participar en política, bajo la premisa de un territorio en paz.
"Gracias a Sofi Ospina por ser nuestra maestra, guía y unión, por motivar y mantener este grupo en el valle, por incentivar la participación de nuevas lideresas y por realizar su proyecto de vida en torno a la lucha de los derechos de las mujeres" resaltaron las asambleístas.
Por su parte Sofi expresó: "Gracias a nuestras diputadas Paola y Catherine por apoyar nuestra iniciativa y hacerla posible, por hacer un trabajo loable en la Asamblea y dejar huella para un mejor futuro. Gracias a Cathe Morales que siempre está dispuesta y comprometida con apoyar nuestros ideales y trabajar con tanto amor al servicio de la comunidad. Gracias a todas por contribuir con su granito de arena a esta lucha que transciende generaciones y que anima a mantener el empoderamiento político de las mujeres".
Discurso de agradecimiento por parte de Sofi Ospina:
Agradecerles a todas las personas que me acompañan en la tarde de hoy a recibir esta distinción que me hace la Asamblea Departamental en este hermoso hemiciclo y emblemático recinto de los y las vallecaucanas.
Me siento muy conmovida y recibo con humildad y sorpresa este reconocimiento, que es realmente un reconocimiento a todas las mujeres que trabajan día a día por los derechos de las mujeres y las niñas a la igualdad y la no discriminación.
Quiero reconocer el papel de cada una de ustedes que hoy me acompañan, así como el de muchas otras que no están aquí presentes, que han facilitado y apoyado las muchas acciones que colectivamente hemos podido lograr con muchas mujeres de los diferentes territorios del Valle del Cauca y regiones de Colombia, brindando esperanza de vivir una vida mejor, libre de todo tipo de violencias, en condiciones de igualdad y sin sufrir discriminación por el hecho de ser mujeres o niñas. No podemos perder la esperanza.
Si bien las mujeres hemos avanzado con relación a la vida que vivieron nuestras madres y abuelas, nos queda un largo camino para lograr la igualdad de oportunidades para todas nosotras y vivir una vida libre de violencias. Los casos de desaparición y abuso y crueldad contra las niñas y adolescentes en nuestra ciudad requieren de todos nuestros esfuerzos.
Al regresar a mi ciudad natal, después de muchos años trabajando por los derechos de las mujeres en diferentes latitudes del mundo, fui recibida con afecto por mujeres activistas que luchan por los derechos de las mujeres. El movimiento social de mujeres de Cali me brindo un entorno e inspiración para realizar el trabajo que he venido realizando desde hace ya casi 14 años.
En el 2011, inicié mi compromiso con el Partido Verde, como delegada desde las “Lunas Verdes” a ocupar el escaño de representación de las mujeres y equidad género en la reciente creada Dirección Municipal de Cali (gracias Gloria Velasco y Lucia Pineda por ofrecerme ese espacio). En ese rol me hice más consciente de las barreras que confrontan las mujeres para ser candidatas y electas y también, de la apatía de muchas mujeres con base social y experticia para participar en la política electoral.
Con ellas y con otras mujeres provenientes de un amplio espectro de horizontes sociales y políticos, algunas de ellas aquí presentes (Martha Quintero, Adriana Loaiza y Rosa Myriam Racines) inicié la tarea para construir un programa de formación a través de una serie de talleres de capacitación enfocados en los derechos de las mujeres, la participación en la toma de decisiones, la construcción de paz, y la importancia de su participación en los procesos políticos para transformar la vida de las mujeres en los territorios.
En estas elecciones locales, por desgracia, hemos visto cómo se reducía el número de mujeres elegidas, lo que nos sigue recordando la fragilidad de nuestros logros y la necesidad de seguir luchando colectivamente por los derechos de todas las mujeres y niñas. Estoy convencida de que el nuevo alcalde de Cali y su equipo de gobierno pondrán todo su empeño en apoyar la igualdad de género y la lucha contra las violencias hacia las mujeres y las niñas y el acoso sexual en el ámbito laboral y de la administración pública.
Además de mi compromiso con el liderazgo de las mujeres en lo político, quiero mencionar el trabajo local que hemos venido realizando desde el 2010 cuando creamos la Asociación Conservar nuestro Entorno en el Corregimiento Los Andes, enfocada al empoderamiento de las mujeres rurales, la protección de nuestro medio ambiente con su avifauna silvestre, las fuentes de agua y resaltar en particular nuestra Campana Enmadroñando Cali (agradecimientos al madroñero Mayor Gerardo Gaviria y al agrónomo Diego Escobar). Se trata de una pequeña asociación pero con la dedicación, motivación y trabajo de un grupo de mujeres, gracias Herlinda Gaviria, nuestra presidenta, y a pesar de no contar con recursos económicos y /o ayuda del Estado, hemos podido sobrevivir estos 14 años y continuar con entusiasmo nuestro trabajo.
Finalmente quiero agradecer a mis compañeras de la Comisión de Genero y empoderamiento de las mujeres del Valle del Cauca (Gilma, Milena, Rosa Myriam, Carolina Montes, y demás compañeras) y a la Comisión nacional de Genero de la Alianza Verde (Rocío Pineda, Angelica Gómez, Marcela Clavijo), por todo el compromiso, dedicación y complicidad en este trabajo monumental que hemos realizado a lo largo de estos 10 años hacia la igualdad política y la lucha contra la violencia política hacia las mujeres. Ha sido un privilegio para mí de trabajar con todas Uds.
Agradecimientos infinitos a todas las compañeras, a Catherine Morales y a la Diputada Paola Arenas por esta iniciativa de reconocimiento. También va mi saludo de aprecio a los compañeros y hombres compinches que nos acompañan en la defensa de nuestros derechos por una sociedad democrática e incluyente que respete los derechos de las mujeres.
