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Sobre el Gobierno del presidente Iván Duque “Ha sido un mal gobierno. Una fatalidad histórica": Antanas Mockus

Hace mucho tiempo Antanas Mockus no concede reportajes, aunque su actividad política es intensa como copresidente del Partido Alianza Verde.

Mockus ha readquirido protagonismo en los últimos días por su intervención para tratar de salvar la unidad de su partido, que hoy atraviesa posiblemente la mayor crisis de su joven historia. Situación difícil creada por la división entre quienes respaldan, dentro de los ‘verdes’, al Pacto Histórico de Gustavo Petro y quienes apoyan a la Coalición de la Esperanza de los demás precandidatos presidenciales acaudillados por Sergio Fajardo.
 
Por otra parte, en este momento la candidatura presidencial de Alejandro Gaviria provoca un gran remezón en la política colombiana. Y a ese fenómeno, Mockus no es ajeno. Dice que recibe esa candidatura “con alegría”.
 
Sobre esa aspiración presidencial, una encuesta realizada por el Centro Nacional de Consultoría contratada y divulgada el viernes pasado por Noticentro Uno, CM&, reveló que Gaviria tiene una imagen positiva del 69 por ciento. Su candidatura fue aplaudida por Mockus.
 
¿Cómo recibe usted la candidatura de Alejandro Gaviria?
 
Con alegría. Es el momento para creer, para aumentar la capacidad de explicar, de conversar, de escucharnos para transformarnos.

Como Gaviria, usted pasó de rector de la Universidad Nacional a candidato a la alcaldía de Bogotá y ganó, ¿qué consejo le daría a Gaviria?
 
Desde la rectoría se trabaja por una universidad pertinentemente articulada y el país también requiere articulación. Mantener la credibilidad, basada no en la retórica del discurso publicitario asociado a la política tradicional, sino en el discurso de la tradición académica, basada en las evidencias y en las consecuencias de los enunciados y argumentos, sería una refrescante y necesaria enseñanza en este proceso electoral.
 
¿Ve ventajas en Alejandro Gaviria como candidato presidencial?
 
Conocimiento y divulgación son la base de la democracia y en estos dos atributos quien haya tenido experiencia en la universidad, como Alejandro Gaviria, lleva ventaja. Un presidente que fue rector sería el mejor símbolo de que el conocimiento está llegando al poder en Colombia. Más y mejor educación es claramente un objetivo compartido por alumnos, educadores, padres de familia, directivos, gobiernos y ciudadanía. Uno de los principales objetivos de gobierno debe ser la educación.
 
¿Qué tipo de liderazgo debería acaudillar Gaviria como candidato presidencial?
 
La capacidad de inspirar la mayor transformación que necesita Colombia es la transformación humana. Esta vez no nos podemos equivocar. El liderazgo que necesita Colombia es un liderazgo de construcción, de independencia de los partidos tradicionales y de sus prácticas. La credulidad de los jóvenes y de diferentes sectores de la sociedad en Alejandro Gaviria puede permitir la inspiración que se requiere para unir y convocar las voluntades de transformación.
Los cambios requieren saber de antemano que muchos de nosotros, que hemos tenido privilegios y beneficios, tendremos que aprender a decir ‘yo paso, siga usted primero’. Saber explicar esto, saber comprometerse y actuar en esta dirección, es uno de los mayores desafíos del próximo presidente. Se necesita un gobierno pedagógico, un gobierno educador y esa es la mayor ventaja de Alejandro Gaviria. Cierto grado de ingenuidad, que algunos pueden verle como debilidad o desventaja, es en realidad una ventaja
 
¿Qué piensa del llamado Pacto Histórico?
 
Es una expresión de la izquierda radical, necesaria en la democracia colombiana. Representa y comunica el sentir de una parte de la sociedad colombiana.
 
¿A usted le gusta la candidatura presidencial de Gustavo Petro?
 
Es importante para la democracia de Colombia tener bien identificadas varias orientaciones ideológicas con su correspondiente visión de país. Gustavo Petro representa una de ellas. La opción ideológica de la izquierda y la izquierda radical con el Pacto Histórico. La derecha y derecha radical tiene sus representantes dentro del Centro Democrático y fuera de él y en su líder más representativo, Álvaro Uribe. Pero la ciudadanía también necesita una opción de centro y centroizquierda que será el candidato de la Coalición de la Esperanza, opción alternativa de unidad.
 
El voto es secreto, ¿pero piensa usted votar por Gaviria?
 
Pienso votar por el candidato de la Coalición de la Esperanza que gane la consulta del centroizquierda en marzo y convoque las fuerzas alternativas en primera y segunda vuelta, para gobernar a Colombia a partir del 2022. Las transformaciones sociales, ambientales, económicas, culturales debemos construirlas entre todos, dentro de la institucionalidad y dentro de la legalidad.
 
¿Cómo ve la situación del país?
 
Muy difícil. Se han cruzado muchas fronteras, muchos límites. Diversos actores del Estado y de la sociedad han actuado impunemente por fuera del respeto a la vida, a la Constitución, a las normas. Cualquier interés tiende a justificar violencias desmesuradas. Una vez más las solidaridades pasajeras no logran ceder su lugar a solidaridades permanentes. Faltan autorregulación y regulación mutua pacífica. Hay que reconocer que en Colombia el pesimismo suele venderse bien.
 
Cuándo Iván Duque ya tiene ‘el sol a la espalda’, ¿cómo califica su gobierno?
 
Ha sido un mal gobierno. Desafortunado para Colombia, inoportuno. Una fatalidad histórica, no supo interpretar el rol histórico que Colombia vivía después de la firma del Acuerdo de Paz. No solo no avanzamos sino que retrocedimos en seguridad, en justicia social, en economía, en convivencia, en política exterior, en legitimidad, en autoestima, en respeto a la vida.
 
¿Qué grandes aciertos ha tenido su administración?
 
La pedagogía ciudadana en los inicios de la pandemia.
 
¿Y qué grandes errores?
 
No reconocer, no entender el milagro, no ayudarnos a ver el orgullo que representaba para Colombia haber logrado terminar 60 años de conflicto interno con las Farc. No haber retomado con decisión y voluntad la implementación de lo acordado. Por el contrario, haberlo saboteado, desestimado. No haber fortalecido de manera inmediata la presencia del Estado en las zonas abandonadas por la guerrilla, con políticas sociales integrales, con fuerza pública e inteligencia militar, que le diera seguridad y confianza a la ciudadanía. No convocar y unir a la ciudadanía, en la construcción del país del posconflicto, desde una cultura ciudadanía para la convivencia pacífica y la seguridad con legalidad.
 
¿No está siendo excesivo en las críticas al presidente?
 
Es posible que en mis juicios al presidente Duque yo esté haciendo eco no solo a la opinión promedio de la ciudadanía sino a las evidencias, a las cifras que acompañan los resultados de su gobierno.
 
¿Esas críticas al presidente Duque no son producto más de la oposición del partido Verde al Gobierno Nacional que de una auténtica opinión suya?
 
No me gusta ser injusto en mis juicios y, en este caso, tampoco creo haberlo sido. Las evidencias, en el territorio y en la calidad de vida de los colombianos, soportan mis afirmaciones. El partido Verde se declaró en oposición al iniciar el gobierno, como se lo permite la ley, pero esta oposición no lo inhabilita para reconocer los logros o avances de un gobierno cuando los tenga, o acompañarlo en decisiones trascendentales en beneficio ciudadano cuando las promueve.
 
¿Qué opina de la gestión de la alcaldesa Claudia López?
 
Buena, desafiante, en medio de las diversas complejidades que ha tenido que gobernar. Respeta al Concejo y la división de poderes y trata honradamente de comunicarse con la ciudadanía. Como ningún otro alcalde en la historia de la ciudad ha tenido que liderar una ciudad con pandemia, paros, bloqueos, crisis económica, entre otras coyunturas.
 
¿Y su opinión sobre el Plan de Desarrollo?
 
Me gusta el Plan de Desarrollo que busca realizar la promesa del programa de gobierno, con una visión de ciudad-región de largo plazo. La idea de un nuevo contrato social que redistribuya los costos y beneficios de vivir en Bogotá.
 
¿Qué grandes aciertos ha tenido?
 
El equipo humano tan calificado y dispuesto a servir a Bogotá. Todos han puesto de sí para sacar adelante a Bogotá, en las vacas gordas y en las vacas flacas, construyendo en medio de las dificultades humanas, presupuestales, y de salud.
 
¿Y cuáles han sido sus grandes errores?
 
Han faltado, a mi gusto, algo más de pedagogía y cultura ciudadana. Ha sobrado impulsividad e impaciencia.
 
¿Cómo le parece que ha manejado el problema de la inseguridad en Bogotá?
 
De manera técnica y racional, aunque ha faltado una aproximación más contundente desde el enfoque de convivencia como la armonía entre ley, moral y cultura, y la violencia vista como el divorcio entre estos tres sistemas de regulación del comportamiento humano.
 
¿Y sus diferencias casi permanentes con el Gobierno Nacional?
 
El contexto nacional e internacional juega un rol importante y yo lamento que no se logren las coordinaciones suficientes para trabajar sincronizados.
 
Muchas veces la alcaldesa culpa al Gobierno Nacional o a la Policía por la falta de seguridad. ¿A qué adjudica usted esa inseguridad que padecen los bogotanos?
 
Es una época excepcionalmente difícil y compleja: la pandemia, la pobreza, la delincuencia común, la delincuencia organizada, los GAO, entre otros factores, nacionales e internacionales, que no se han abordado de manera suficientemente coordinada con el Gobierno Nacional, van pasando su factura. Como sociedad nos ha faltado autorregulación ciudadana y capacidad para regularnos mutuamente en el espacio público y en los lugares donde somos ciudadanos. La solidaridad expresada en la capacidad para hacer acuerdos, cumplirlos y repararlos por vías pacíficas sin que medie la violencia, también ha estado débil. La convivencia pacífica y la seguridad ciudadana requieren autorregulación, regulación mutua, prevención, persecución y judicialización y estas acciones no dependen solo de la alcaldesa de Bogotá o del gobierno local.
 
Desde hace un par de meses su partido no deja de ser noticia por las discusiones internas. ¿Pondrá orden en la casa?
 
Creo en la mayoría de edad. Creo en que debemos actuar a la altura de la confianza depositada por parte de los electores hace tres años. También creo en la capacidad del partido Alianza Verde de interpretar el momento que vive Colombia y en el rol que tiene en este momento para convocar a los diferentes sectores y liderar una coalición de centro y centroizquierda capaz de dirigir un gobierno alternativo de centroizquierda para los próximos años en Colombia.
 
¿Usted de qué lado está?
 
Del lado de la Constitución del 91. Me gusta decir que cuando he gobernado he tomado decisiones que algunos pueden leer de derecha y otros pueden leer de izquierda, pero lo que me ha guiado es realizar el Estado social de derecho, pluriétnico, multicultural y laico, que enmarca nuestra Constitución. Y bajo una aplicación drástica del artículo 12 : ‘El derecho a la vida es inviolable, no habrá pena de muerte’.
 
Pero a usted, ideológicamente, se le advierte mucho más de izquierda

Si usted me quiere ubicar en un espectro ideológico, podría ubicarme de centro y centroizquierda, estoy por fuera de los radicalismos. Colombia tiene una clara representación de la derecha radical en el Centro Democrático y en su líder principal, Álvaro Uribe. Y una clara representación de la izquierda en el Pacto Histórico y en Gustavo Petro, como su principal líder.




Artículo de El Tiempo

https://www.eltiempo.com/politica/partidos-politicos/antanas-mockus-habla-sobre-alejandro-gaviria-y-claudia-lopez-613903


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